B. Central: empresarios creen que desempeño de sus negocios el segundo trimestre mantuvo debilidad del primero

Según el informe de percepción de negocios dado a conocer hoy por el Banco Central, que resume las opiniones de la administración de alrededor de 100 empresas a lo largo del país, la gran mayoría de los entrevistados cuyas actividades están orientadas al mercado interno coinciden en que el desempeño de sus negocios en el segundo trimestre mantuvo la debilidad del primero y, en algunos casos, se acentuó.

Por otra parte, sigue la negativa percepción de los consultados respecto de la evolución de las actividades
ligadas a la inversión, al mismo tiempo que aquellos relacionados con el consumo, con excepción de parte
de la macrozona sur, dan cuenta de una creciente debilidad.

Los entrevistados apuntan a un tercer trimestre de características similares al segundo, esperando que la situación mejore hacia fines de año. Varios de ellos consideran que no será sino hasta el 2015 cuando se
comience a observar alguna mejoría.

Contrasta con estavisión la percepción de gran parte de los entrevistados del rubro inmobiliario y exportador, cuyos negocios siguen mostrando dinamismo —los primeros— o han mejorado sus resultados —los segundos, por efecto mayormente de la depreciación del peso—.

Transversalmente los encuestados señalan factores de incertidumbre que han afectado sus decisiones y consideran están alterando las decisiones de sus pares y de los consumidores. En particular, por las dudas que perciben respecto de la estabilidad de las fuentes laborales y el efecto de los cambios tributarios en discusión.

Las perspectivas para la inversión siguen apuntando, según los encuestados, a un bajo crecimiento, mayormente asociado a la reposición obligatoria de la capacidad instalada o algunas mejoras que permitan ahorrar mano de obra en sectores como el agrícola, que aún presentan escasez de ella.

Respecto del mercado laboral, a diferencia de períodos previos, se reportan pérdidas de puestos de trabajo, ya sea en las empresas contactadas o en otras de sus rubros, principalmente en el centro y norte del país. Asimismo, con excepciones en el sector agrícola y en la zona sur, se informa mayor disponibilidad de mano de obra y menores presiones salariales.

En cuanto a los costos, luego de las preocupaciones mencionadas a comienzos de año por los efectos de
la depreciación del peso, en el segundo trimestre no se observan mayores cambios. Sí resalta que una parte importante de los entrevistados apunta a un proceso de reducción de costos enfocado en la búsqueda de alternativas más baratas de insumos y servicios, y/o en la mayor polifuncionalidad de los trabajadores.

Como ha sido la tónica, el costo de la energía y los combustibles son un elemento de preocupación transversal entre sectores y regiones. Destaca en el norte del país una preocupación extendida por la influencia que el retraso en la concreción de proyectos energéticos está teniendo sobre la evolución económica de la zona.

En cuanto a las condiciones financieras, hay amplia coincidencia en que se han vuelto algo más restrictivas en cuanto a la solicitud de requisitos para acceder al crédito, resaltando que el sector inmobiliario aprecia una mayor restricción por parte de los bancos. Con todo, señalan que en cuanto a costos y montos no se observan movimientos mayores, y si algo, las tasas de interés se han reducido.

Los bancos entrevistados concuerdan con esto y destacan la mayor dificultad para colocar créditos en el ámbito comercial y de consumo. A juicio de la banca, las personas y empresas están evitando aumentar su endeudamiento dado el panorama de mayor incertidumbre.